Durante diez años el Imperio español conquistó las islas de Filipinas, se fundó Cebú y Manila, pero todavía quedaba una prueba de fuego. Una flota de sesenta navíos liderados por Limahon, un señor de la guerra chino que tenía como objetivo invadir la recién fundada Manila. ¿Con qué propósito? Esta es la historia de Juan Salcedo, nieto de Miguel López de Legazpi, y de cómo defendió Manila junto a unos pocos hombres, forjando así la estancia de los españoles en las islas por más de trescientos años.