De camino a la capital, el juez Bao se libra, de milagro, de un terrible accidente. En medio de una tormenta de nieve y separado del grueso de su tropa, encuentra refugio en un monasterio donde un buda milagroso alimenta la codicia, un fantasma aterroriza a los monjes y nuestro magistrado, solo y sin protección, deberá luchar por su propia supervivencia…