Criado en una familia humilde y muy religiosa, Craig Thompson trabajó de los diez a los veinte años en los campos de ginseng de Wisconsin. Hoy, a sus 49 años, de vuelta a los lugares que inspiraron Blankets (edición 20.º aniversario, Astiberri, 2024), obra que le hizo mundialmente conocido, ha decidido enfrentarse a su legado y a todo lo que en esas páginas no tuvo fuerzas para contar, recopilando los recuerdos de su padre, su madre, su hermano Phil, su hermana Sarah y mucha gente de su pueblo natal, cuya economía sigue girando en torno al ginseng. Excavando en los lugares de la memoria, Craig va en busca de sus errores y de sus raíces. Raíces que a veces, al igual que el ginseng, contienen el secreto para curar todos los males.
De los 10 a los 20 años, Craig Thompson y su hermano pequeño Phil trabajaron en granjas de Wisconsin. Desherbar y cosechar ginseng -una hierba medicinal exótica que reportaba enormes beneficios en China- financió la obsesión juvenil de Craig por los cómics, y los cómics, a su vez, le permitieron escapar de su entorno rural y obrero.
Raíces de ginseng es un relato arrollador que desentierra sorprendentes conexiones entre la división de clases, la agricultura, la curación holística, la relación comercial de 300 años entre China y Norteamérica, el trabajo infantil y el vínculo entre dos hermanos.