Un cuento inspirador que recoge los maravillosos deseos de una madre para que su hijo descubra todo lo maravilloso que le puede ofrece la vida.
«A veces, cuando duermes, vigilo tu sueño, y también yo sueño que algún día...»
Un libro que emocionará y cautivará tanto a padres como a hijos.
Un día conté tus dedos y los besé todos uno a uno'. Con esta frase abre Alison Mcghee el hermoso texto de este cuento que recuerda los momentos importantes en la vida de la hija de la narradora. Ver la nieve como se deshace en la piel de su bebé, aprender a cruzar la calle, o andar en bicicleta son situaciones en la vida de todos los niños que poco a poco les ayudan a hacerse adultos. Y poco a poco es como este libro, sin ahorrar ninguna etapa, acumula las emociones de una vida hasta que la narradora, mucho mayor de lo que era al inicio del cuento, describe el futuro en el que 'algún día yo estaré en este porche y miraré tus brazos, saludándome, hasta que desaparezca'.